Qué es la diversificación

La diversificación es un tipo de estrategia de gestión de riesgos, que se puede utilizar con el comercio con acciones, CFD o con criptomonedas. Su principal objetivo es reducir el riesgo de las inversiones. La lógica detrás de esto es, que el trader no pone todo su dinero invertido en una clase de activos, sino que hace una diversificación y más bien invierte en más diferentes.

Con el trading clásico o la inversión esto significaría que el trader pone su dinero, que está destinado a la inversión o el trading, en por ejemplo acciones, índices y materias primas. Si uno decide operar sólo con una clase de activos, puede hacer la diversificación como, por ejemplo, invirtiendo dinero en oro, petróleo y café. Cuando hablamos de operar con criptodivisas, la lógica y los principios siguen siendo los mismos. En lugar de poner todo el dinero en Bitcoin, se puede reducir el riesgo invirtiendo la misma cantidad en Bitcoin, Ethereum, Ripple, etc. La idea al final es que el rendimiento de las inversiones positivas superará al de las negativas.

Según estudios y modelos matemáticos, el mayor nivel rentable de reducción del riesgo se consigue manteniendo una cartera bien diversificada de 25 a 30 activos diferentes. Invertir en más activos proporciona más beneficios de diversificación, aunque a un ritmo mucho más lento. El objetivo de la diversificación es suavizar los riesgos no sistemáticos de una cartera garantizando que el rendimiento positivo de algunas inversiones compense el rendimiento negativo de otras. Sólo si los valores de la cartera no están completamente correlacionados -es decir, si reaccionan a los factores del mercado de manera diferente, a menudo de forma opuesta- la diversificación resulta rentable.

Las ventajas de la diversificación son la reducción del riesgo en la cartera, lo que también significa que protege de alguna manera al inversor de la volatilidad del mercado y ofrece mayores rendimientos en la inversión a largo plazo.

Las desventajas son, en primer lugar, la limitación de las ganancias de la inversión a corto plazo, así como el mayor coste para el inversor de los gastos o comisiones de las transacciones. Este tipo de estrategia también puede requerir más tiempo de gestión.

Basándose en la información anterior, cada inversor debe considerar por sí mismo qué tipo de estrategia desea seguir y si la estrategia de diversificación se adapta a sus objetivos y a su idea del comercio y la inversión. Sin embargo, si las inversiones de menor riesgo son más adecuadas para usted, ésta sería una buena elección. La mayoría de los fondos de cobertura utilizan esta técnica, ya que invierten en múltiples clases de activos para minimizar el riesgo y proteger así los fondos de inversión de sus clientes.